Las conciencias no claras
Lo cabrón de las conciencias no claras
es que son las únicas que pueden
sacarnos del cascarón.
¿Somos hombres o payasos?
no importa
Sólo posibilidades de nosotros mismos
Los ojos:
La pantalla de nuestro propio lenguaje
Ventanas hacia todos los miedos
soledad , muerte, enfermedad,
vida
eso nos tiene aquí
destilándonos como mezcal
fermentándonos como pulque
muriendo
como cuando niños
(y)
más se sufre porque todo es nuevo
¡Carajo!
tan jóvenes y creemos que podemos darle lo suyo
a alguien.
Somos cobardes en nuestro propio mundo.
Fuera de ahí
nada
Vagabundos de nuestra propia existencia.
Abre los ojos,
Ábrete a ti mismo y a lo otro
Sé un pollo rostizado dando vueltas
Entre la cebolla y el fuego
Un borrego enterrado en la tierra
esperando ser barbacoa.
Tu propio alimento y tu propia porquería.
Vida y muerte, salud y enfermedad
Placer y dolor
Nada, nada, nada
Todo, todo
Fuera de ahí
nada
Vagabundos de nuestra propia existencia.
Abre los ojos,
Ábrete a ti mismo y a lo otro
Sé un pollo rostizado dando vueltas
Entre la cebolla y el fuego
Un borrego enterrado en la tierra
esperando ser barbacoa.
Tu propio alimento y tu propia porquería.
Vida y muerte, salud y enfermedad
Placer y dolor
Nada, nada, nada
Todo, todo
Fuera de ahí
nada
Vagabundos de nuestra propia existencia.
Abre los ojos,
Ábrete a ti mismo y a lo otro
Sé un pollo rostizado dando vueltas
Entre la cebolla y el fuego
Un borrego enterrado en la tierra
esperando ser barbacoa.
Tu propio alimento y tu propia porquería.
Vida y muerte, salud y enfermedad
Placer y dolor
Nada, nada, nada
Todo, todo
Siento el crujir
Siento el crujir del piso de duela bajo mis pies,
el peso de mi cuerpo se hace notar en el gruñido del suelo.
¿Verdaderamente se puede pesar un cuerpo en gramos?
¿Cuál es el peso del sonido del suelo
cuando caminas sobre él?
¿Cuál es el peso de una voz
de una melodía
de un poema?
¿Cuál es el peso en gramos, kilos o toneladas
de una emoción
del desamor
de una mentira?
Se puede estar harto del peso del dolor pero,
¿Se puede estar harto del peso de una caricia
de un suspiro?
¿qué pesa más
¿qué pesa?
el peso tiene algo que ver con el hartazgo,
lo demás pertenece a la ligereza
que permite la libertad.
Una canción, un poema
amar desde el fondo del corazón.
Desde ese rincón en el que está el llavero que abre todas las puertas del universo.
Con ella fui
¿Cuál es el fondo?
¿Se puede tocar?
Esta semana el novio de mi amante se enteró de lo nuestro.
La culpa y el terror se apoderaron de mí un par de días.
La terca idea de la monogamia me provoca ternura.
Entre el compromiso y la pasión:
el tibio marchitar de mis impulsos más íntimos, más putos, más putas, más míos.
Pienso en su cuerpo desnudo.
En el apiñonado sabor de sus nalgas suaves.
En el lento abrir de sus labios.
En el cuchareo cálido y sudoroso.
En el regaño de los ojos de él, llenos de sangre.
El cadáver de su puberto sueño.
Se prometieron eternidad, planearon el futuro, se dijeron te amo.
Paseaban como conejitos brincando por el bosque.
Yo llegaba hasta los silencios entrecortados de su respiración.
Se imaginaron fundidos en absolutos
Yo florecí con ella todas mis semillas.
Pero si somos sinceros, siento culpa, vergüenza, pena:
soy el más terrible monstruo de todo el cine de terror.
soy los tambores de una mala batería
retumbando en mi propia cabeza.
Pero no me arrepiento porque con ella fui arcoíris.
Tonos naranja del sol al amanecer.
Besos en la mañana con aromas insospechados.
Orgasmos que provocan estertores, temblores
pequeña muerte.
Con ella fui amor.
Emiliano Martínez Escoto (CDMX, 1992)
Estudió filosofía en la UNAM. Ha publicado textos en diversas publicaciones impresas y digitales, en antologías de narrativa, crónica y ensayo. Su principal labor es organizar fiestas culturales en la Pulquería Insurgentes. Tiene una columna en la Revista Cáñamo y trabaja en la realización de diversos eventos culturales. |